miércoles, 25 de mayo de 2016


NUESTRA MANERA DE SER ANTE LA VIDA                                    Ernesto Mollinedo

Hace tiempo atrás nuestros  padres  nos recomendaban que para tener éxito en la vida y pasarla bien, una de las condiciones que debíamos de cumplir era que teníamos que estudiar para sacar una carrera profesional o aprender un oficio para poder tener una forma digna de ganarnos la vida.

Se nos exigía estudiar “duro”, sacar buenas notas y obtener un  título profesional. Debíamos de ser  ser responsables y honestos en nuestro desempeño como trabajadores o empleados  y eso nos garantizaría una larga estadía en una empresa.  En ese momento nuestros padres, tratando de hacer lo mejor que podían y de la forma como se vivía en ese momento, nos estaban ayudando a tener conocimientos y habilidades.

No todas las personas tuvieron el privilegio de poder formarse en la universidad en una carrera profesional, mas le toco formarse en la universidad de la vida  y adquirir habilidades que les sirvieron  para ganarse la vida dignamente y salieron adelante igual que todos.                             

¿Qué fue lo que les ayudo?  Su  actitud ante la vida.

En la actualidad vemos como  la forma de vivir y desempeñarse en ella ha cambiado gracias a las comunicaciones, la tecnología y las influencias globales.   Ya no solo es importante el conocimiento y las habilidades adquiridas, sino ahora hay un elemento que es fundamental para este nuevo desempeño y que las empresas y las personas  ahora la valoran como lo más importante: La actitud y forma de ser con la que enfrentamos los nuevos desafíos.

El coach Víctor  Küppers en una conferencia en TED nos explica una fórmula que nos puede ayudar a entender esto: (conocimientos + habilidades) x actitud = valor ante la empresa y las personas.  El explica que es importante que tengamos conocimientos y habilidades, pero el gran factor (Y el más importante) que multiplicara nuestro valor, es la actitud y la manera de ser ante cada desafío y situación de la vida a enfrentar.

Yo lo considero una gran verdad, porque ahora en la época actual y con la nueva forma de aprender, y como lo he dicho en otros artículos, el conocimiento es de muy fácil alcance, y las habilidades con disciplina y perseverancia se adquieren y se perfeccionan, pero con su manera de ser y su actitud, multiplican estos factores, haciendo que su valor como trabajador aumente y su marca personal sea muy bien reconocida.

¿Por qué algunas personas con menos conocimientos y habilidades que otros les va mejor en la vida? La respuesta es simple: por su actitud y forma de ser.

Le invito a reflexionar sobre este punto y tomar una nueva actitud y convertirse en un nuevo observador ante su vida y desarrollo personal, que estoy seguro que cuando esta sea  positiva, se multiplicara su valor como marca personal y será más fácil encontrar solución a todas estas situaciones que atraviesa en este momento ante su vida laboral

Si le gustaría conversar conmigo sobre este tema y poder ayudarlo de alguna manera, Le invito a que me escriba a mi correo,   y  seguir intentando tener  una vida buena. ¡Animo que usted, lo puede lograr, las respuestas están en usted  y la decisión es suya!
 
LAS EMOCIONES Y EL FUTURO EN NUESTRO BIENESTAR PERSONAL 
En las 2 últimas veces que escribí en esta columna,  comente con ustedes sobre la importancia de  observar nuestro pasado y vivir nuestro presente desde ciertas emociones que podrían generar estados de ánimo positivos y provocarnos un cambio de actitud generando  un estado de bienestar interno en cada uno de nosotros.
Como recordatorio, les comentaba que al ver para atrás, lo hiciéramos desde las  emociones de la satisfacción, la complacencia, el orgullo de haberlo vivido, la serenidad y la gratitud;  Con respecto al presente vivirlo desde la emoción de la alegría, el éxtasis, la tranquilidad, el entusiasmo y  el placer ,ya que probablemente al revisar nuestro actuar podremos encontrar muchas comportamientos positivos   y provocar  un estado de “flow” en nosotros, los cuales nos hará sentir bien y entrar en bienestar con las personas y  nosotros mismos.
¿Qué pasa con el futuro? ¿Desde qué emociones deberíamos observarlo?
El futuro a muchas personas nos genera incertidumbre, porque no sabemos lo que pasara y  sentimos que no podemos controlarlo, pero  está a nuestro alcance, el hacer y generar  acciones para influenciar  a que sucedan acontecimientos que nos agraden y nos ayuden en nuestro bienestar.
Recordando que nuestras emociones generan acciones, ¿Cuáles cree que podrían ser estas emociones para generar estas acciones que pueden producir bienestar ante nuestro futuro?
Martin  Selligman en su libro “la autentica felicidad” y precursor del movimiento de la psicología positiva, nos recomienda las siguientes emociones: el optimismo, la esperanza, la fe, la confianza y la seguridad.
Ver nuestro futuro con optimismo, nos llevara a confiar a que  los próximos acontecimientos que sucedan serán buenos para nosotros y de alguna manera contribuirán a producirnos una sensación de  bienestar en nuestra vida.
Vivir  el presente y ver el  futuro con esperanza, nos provocara  a tener  objetivos y proyectos que nos generen bienestar, lo cual provocara  el deseo de alcanzarlos, por  lo que generaremos acciones desde esta emoción, luchando por una vida mejor para cada uno de nosotros.
La emoción de la fe, será nuestro alimento o combustible que necesitamos para darnos la energía y la fuerza interior que todo ser humano necesita para los momentos en los cuales son difíciles de avanzar.
El futuro nadie lo puede predecir, pero si podemos tener una actitud positiva ante él, si lo vemos con emociones positivas y  generamos  acciones para influenciarlo, si podremos  cambiarlo y lograr ese bienestar que es tan importante para toda persona.  No se desanime si no todo sale como lo planeo, la flexibilidad y la aceptación siempre deberá estar presente para tener la sabiduría de  cambiar los planes y la serenidad de tomar las decisiones acertadas y sigamos en la búsqueda de una vida buena y  recuerde que “no hay personas que fallen, solo han dejado de intentarlo”, así que ¡animo que usted lo puede lograr!
 

lunes, 16 de mayo de 2016


LAS EMOCIONES Y EL PRESENTE EN NUESTRO BIENESTAR PERSONAL               

En la última vez que escribí (hace 15 días) comentaba sobre la importancia de cerrar círculos y algunas puertas que nos habían afectado en el pasado para empezar a sentir nuestro bienestar personal  en el presente y esto lo podíamos lograr empezando  trabajar en nuestro viejo observador y cambiarlo por uno nuevo.

¿Cómo lo hacemos? Le sugería que empezara a mirar las situaciones pasadas con una nueva actitud para generar emociones positivas al respecto y cambiar su estado de ánimo y verlas desde  las  emociones de la  satisfacción, la complacencia, la realización personal, el orgullo, la serenidad y la gratitud.

Ahora quisiera conversar  de esta misma actitud positiva en el presente.  El presente  lo podríamos definir como el momento o situaciones actuales que estamos viviendo en el aquí y el ahora, y tiene la gran ventaja de que al darnos cuenta de  nuestra presencia en los momentos actuales de nuestra vida, podemos disfrutar al máximo esa sensación y sentir el gozo y la apreciación de lo que nos rodea.

¿Cuáles cree que podrían ser estas emociones que le pueden transmitir  tranquilidad y bienestar en el presente?

La psicología positiva nos recomienda las siguientes emociones para lograr un mejor bienestar en el presente y son: la alegría, el éxtasis, la tranquilidad, el entusiasmo, placer y fluidez.

Al tratar de  vivir el presente con  alegría, nuestro cuerpo biológicamente produce sustancias que nos producen sensaciones corporales y están se convierten en emociones positivas, las cuales nos permitirán sentir sensación de bienestar.

El éxtasis es vivir al máximo  estas  sensaciones que sentimos en nuestro cuerpo, como por ejemplo, el viento en la cara, el agua en la ducha, el sabor de una buena comida y la sensación de descanso después de una siesta.

La tranquilidad vendrá por medio de la aceptación a lo que estamos viviendo sin alterarnos y pensando positivamente que algo bueno puede suceder y pasara en nuestro futuro.

Si vivimos la emoción del entusiasmo, nos llevara a la acción y nos motivara a movernos  y estar siempre avanzando hacia adelante y con esta sentiremos el placer de estar haciendo lo que nos gusta, y nos permitirá fluir desde lo más profundo de nuestro ser en lo que brillamos y destacamos.

Algunos de ustedes estarán pensando que suena fácil decirlo, ¿pero que hacemos con todo lo que ha  pasado y sentido? , en lo personal, le recomiendo que empecemos a trabajar en el desapego y en el perdón, y sugiero tomar una actitud positiva ante el pasado y pensar que este ya no se puede cambiar y  el futuro aun lo desconozco, pero lo puedo cambiar con mi nuevo observador que soy, por lo que lo único que tengo en este momento es el presente, y debo aprovecharlo para empezar a cambiar  y lograr las expectativas que tengo del mañana.

Le invito a que visite mi nuevo blog: http://porunavidabuena.blogspot.com/ y comentemos al respecto y me comparta sus ideas y sugerencias, ya que todo este intercambio nos permitirá que sigamos en la lucha y la búsqueda de una vida buena, ¡animo que usted lo puede lograr!